Las conexiones WiFi se han vuelto la recepción de cualquier lugar que frecuentamos. Cuando las personas van a bibliotecas, restaurantes, coworkings, universidades o simplemente a la casa de un amigo, es muy normal escuchar como primera pregunta: ¿Cuál es la clave del WiFi? Y como no ser amable y conceder el acceso.
Debido a esta gran proliferación, las conexiones WiFi se han vuelto no solo el punto de entrada de las visitas que esperamos, sino también de las que no esperamos, por esta razón, en este artículo te daremos algunas recomendaciones básicas para asegurar las conexiones WiFi de tu lugar.
- Usa el cifrado WPA2 o superior (Wi-Fi Protected Access) con una contraseña fuerte (visita nuestro artículo de contraseñas seguras). Actualmente cualquier dispositivo WiFi cuenta con este tipo de configuración. Lo que esto busca es que los datos que se transmiten a través de una red Wi-Fi sean privados y no puedan ser interceptados por una tercera persona.
- Asegúrate de mantener actualizado el software del enrutador. Configura tu enrutador para que instale automáticamente las actualizaciones de software a medida que estén disponibles. Las actualizaciones permiten mejorar el funcionamiento y la seguridad del dispositivo.
- Cambia el SSID por defecto (Nombre de la red WiFi) al igual que la contraseña. Cuando adquieres un enrutador o servicio de internet nuevo, estos vienen con una configuración de fábrica, que generalmente es la misma en todos los dispositivos según su marca y/o operador. Esto es información valiosa para los atacantes ya que con solo una búsqueda en internet, podrían encontrar la información de acceso por defecto al dispositivo.
- Desactiva el acceso remoto al enrutador. La mayor parte de los usuarios no necesitan este tipo de funcionalidades.
- Desactiva la funcionalidad WPS (WiFi Protected SetUp). Esta función permite conectar los dispositivos utilizando un PIN en lugar de la clave WPA, lo cual es vulnerable y se ha demostrado la facilidad con que un atacante podría obtener el PIN.
